Para algunos quizá sea exagerado calificar el concurso de mates del All Star de esta temporada como el mejor de la historia. Bastante tendrían que decir sobre ello Michael Jordan y Dominique Wilikins, protagonistas de un duelo histórico en 1988 que sirvió para propularizar este certamen.
De cualquier modo, el enfrentamiento final entre Zach Lavine y Aaron Gordon quedará como uno de los mejores de la era moderna y, como tal, se hace merecedor de la comparación con el concurso de 1988. La NBA, atenta a este tipo de equiparaciones históricas, ha producido este espectacular vídeo que mezcla imágenes de ambas citas.
Los tiempos cambian. Es evidente que los jugadores son más fuertes, saltan más y se atreven a acciones de más mérito, y eso se aprecia en la evolución de cada mate. Es una ley natural que quizá hace injusta la comparación con algo que ocurrió hace 28 años pero que dejó huella profunda, también por la innovación en aquel tiempo. De cualquier forma, las imágenes son para quedarse con la boca abierta.